Aunque muchas personas se alegran con la llegada de la primavera, sus temperaturas más cálidas, sus flores y árboles floreciendo, para las miles de personas que padecen rinitis alérgica y alergia al polen, esta estación puede traer más malestar que felicidad.
¿Qué es el polen?
El polen es un polvo muy fino generado en las flores, cuyo propósito es fertilizar otras plantas de la misma especie. Para que la polinización sea exitosa los granos de polen deben viajar de una flor a otra, a través del viento. Este proceso crea semillas con información genética para una nueva vegetación.
El proceso de polinización se produce generalmente en primavera, verano y otoño cuando el polen es más liviano y seco, y se dispersa fácilmente desde césped, árboles y malezas. Por otra parte, las plantas con flores poseen un polen más grande y ceroso que es trasladado entre ellas por las abejas y otros insectos.
Aunque se trata de un fenómeno natural y en pro de la vegetación, resulta ser muy perjudicial para quienes sufren de alergia a este polvillo, debido a que no solo genera rinitis y molestias en vías respiratorias, sino también en la vista.
Para quienes usan lentillas, resulta muy incómodo debido a que los ojos comienzan a presentar ciertas molestias que impiden un enfoque nítido e incluso dificultan cualquier tipo de actividad.
Síntomas de la alergia al polen
Las alergias se producen cuando las proteínas liberadas por el polen ingresan en las membranas mucosas de los ojos, nariz y boca. En personas alérgicas, el sistema inmunitario confunde a esas proteínas con gérmenes invasores y activa un proceso en el que el cuerpo genera sustancias químicas como las histaminas para irritar los nervios, lo que provoca picazón y estornudos para intentar expulsar o eliminar el polen.
Los síntomas de la alergia al polen varían de una persona a otra, pues en algunos pueden presentarse ataques de estornudos y en otros solo molestias en las mucosas. Sin embargo, para quienes utilizan lentillas, estos síntomas suelen empeorar debido a que el polen puede adherirse a la superficie de la lente.
Estos síntomas, aunque parecen molestos, ayudan a expulsar físicamente el polen del cuerpo o alertar sobre un alto nivel de polen, por lo que habría que alejarse del lugar lo antes posible.
Otro síntoma podrían ser otras molestias como enrojecimiento, secreción abundante e incluso llegar a generar una molestia que te obligue a retirar la lentillas de tus ojos. Es importante destacar que los síntomas de alergia al polen suelen empeorar cuando el día está caluroso, seco y ventoso.
Alergias oculares
La llamada ”conjuntivitis alérgica” es lo que normalmente denominamos alergias oculares. Constituyen unas afecciones comunes en las que el tejido que recubre el interior del párpado y el exterior del globo ocular, llamado conjuntiva, se inflaman por efecto de agentes alérgenos. Esto ocasiona enrojecimiento y picor en ambos ojos, motivando al usuario a retirar las lentillas e incluso descartarlas, para preservar la salud ocular.
Es importante destacar que las alergias oculares no son contagiosas por lo que es imposible transmitirlas de una persona a otra. Sin embargo, debe tener en cuenta que los ojos son un blanco fácil para los alérgenos e irritantes ya que están expuestos y son sensibles a las micropartículas. Estos síntomas se intensifican con el uso de lentillas.
Signos que alertan la presencia de alergias oculares
Estos son los signos y síntomas más comunes de las alergias oculares:
- Enrojecimiento de ambos ojos.
- Picor o escozor.
- Sensación de ardor.
- Ojos llorosos.
- Párpados inflamados.
- Sensación de tener un objeto o arenilla en los ojos.
- Es posible tener goteo o picor en la nariz, estornudos, tos o dolor de cabeza.
- Otras personas encuentran la visión un poco borrosa o cansada.
¿Cómo afecta la alergia al polen en el uso de lentillas?
Una de las reacciones alérgicas más frecuentes en tiempos de polen es la llamada rinoconjuntivitis y se caracteriza por una serie de reacciones molestas como excreción de moco líquido, estornudos en rachas o ráfagas, congestión y picor en la nariz, molestias en los ojos, lagrimeo y ojo rojo.
Estos síntomas abren paso a lo que luego conocemos como una inflamación alérgica de la mucosa.
Recomendaciones sobre alergia al polen con el uso de lentillas
Las personas que sufren de este tipo de alergias y que, además utilicen lentillas o lentes de contacto, deben seguir una serie de medidas de higiene y de precaución. ¿Por qué? Para evitar posibles complicaciones o problemas durante las semanas de primavera o mientras duren las condiciones adversas en el ambiente que respiran.
- En primer lugar, es importante mantener una excelente higiene de la cara y de las manos. Así se evita cualquier escozor o irritación en los ojos por haber tocado alguna superficie con algún agente alergénico.
- También es importante evitar tocarse los ojos aunque sintamos alguna molestia o picazón, o si tenemos la sensación de tener algún cuerpo extraño, ya que esto sólo provocaría un mayor enrojecimiento y más irritación.
- Trate de utilizar lentillas desechables diarias, ya que con ello se evita la acumulación de depósitos de polen en la superficie de la lente, en caso de que los niveles sean altos en el ambiente.
- Incluya el uso de gafas de sol a diario si se realizan actividades al aire libre, como barrera de posibles alérgenos.
- En caso de que empiecen las molestias oculares con la temporada, hay que tratar de disminuir el uso de lentillas para no agravar la irritación. De ser imprescindible, mejor usarlas por la tarde que es el momento del día donde suele haber menos polen en el ambiente.
- Al sentir molestia, aplique lágrimas artificiales como una forma de aliviar el ardor o picazón en los ojos producto de los alérgenos y al mismo tiempo mantener los ojos hidratados.
- Otra cosa importante que podemos hacer es mantener puertas y ventanas cerradas y utilizar aire acondicionado con filtro antipolen. En caso de ir en coche, mantener las ventanillas cerradas para evitar el contacto con el polen en el ambiente.
- Por último, en caso de irritación y/o pérdida de la visión, suspende inmediatamente el uso de lentillas y acude sin tardanza a la consulta de un profesional de la visión.
¿Es seguro utilizar lentillas si eres alérgico al polen?
Los efectos de las alergias afectan negativamente a la salud ocular, y por ello es recomendable dejar de usar lentillas al notar que los síntomas de alergia se pueden agudizar. Y es que con ello se evita que los alérgenos se adhieran en la superficie. Si este es el caso, podrían empeorar los síntomas, por lo que debemos tener en cuenta que:
- Durante la temporada de alergias, entre marzo y septiembre, debemos evitar su uso.
- Promover el uso de gafas, ya que éstas no suelen atraer alérgenos y los lentes protegen contra el polen del aire.
- En caso de ser imprescindible su uso, es preferible hacerlo en horas de la tarde y noche.
- Usar siempre lentes de contacto desechables diarias.
¿Existe algún tratamiento para las alergias oculares?
Las alergias oculares son muy molestas pero hoy día hay disponibles muchos productos prescritos por los especialistas, que ayudan a aliviar sus síntomas. Entre ellos podemos encontrar:
- Varias formas de gotas específicas para los ojos, que aportan una sensación de alivio a los síntomas de la alergia, atacando el enrojecimiento de los ojos y el lagrimeo.
- Los antihistamínicos o antialérgicos pueden combatir el problema desde la raíz, ya que bloquean la unión de la histamina a las células del cuerpo que producen la reacción alérgica. Éstos se encuentran en solución oral o gotas.
- Si las molestias persisten, es recomendable la visita al médico de cabecera.
¿Cuándo utilizar las lentillas nuevamente?
Lo ideal sería esperar a que todos los síntomas hayan desaparecido antes de volver a usar las lentillas a tiempo completo. Aun así, ya hemos mencionado que los niveles de polen son más bajos en horas de la tarde, por lo que se pueden empezar a usar a esas horas. Si se están utilizando gotas para los ojos, es importante comprobar el prospecto para hacer un buen uso de ellas.