Lentillas y ojos rojos: causas y remedios

Alguna vez le puede haber sucedido que, tras unas cuantas horas con las lentillas puestas, los ojos se le enrojezcan o irriten. Es algo bastante molesto para el que lo sufre, pero en la mayoría de los casos no se trata de nada grave. ¿Pero por qué se produce? Las causas pueden ser múltiples. Afortunadamente, los remedios para evitarlo también son variados.

Una adecuada utilización de las lentes de contacto previene de los ojos rojos por lentillas

Una de las principales causas de los ojos rojos por culpa de las lentillas es el mal uso de éstas, o su uso sin la supervisión de un profesional. Recuerde siempre que estamos hablando de su salud, y que los ojos son una parte muy delicada del cuerpo. Por ello, es imprescindible que, antes de comprar sus lentillas, acuda a un profesional óptico para que sea éste, y no usted, el que decida qué tipo de lente es más adecuada y se adapta mejor a sus ojos. Y es que además de la graduación (que por otra parte, podría ser distinta en gafas y en lentillas), existen muchas otras informaciones que pueden escapar a los profanos: por ejemplo, variables como el material del que están fabricadas, el porcentaje de agua, etc.

Un buen mantenimiento de sus lentillas es fundamental

Otro origen frecuente de la irritación de los ojos es el descuido en el mantenimiento de las lentillas. En ocasiones, todos podemos caer en buscar el ahorro fácil, y puede ocurrir que, por pagar un poco menos, acabemos utilizando productos que no son los más adecuados, o que no cuentan con las características necesarias para la limpieza y el mantenimiento de nuestras lentillas. Pero ya se sabe, en ocasiones, lo barato sale caro.

Es totalmente normal que sus lentillas puedan acumular polvo o suciedad a lo largo del día. Por ello, en Lentillas ¡sí! recomendamos el uso de líquido para lentillas de calidad que garantice una correcta limpieza y desinfección de las mismas. Con estos líquidos podrá evitar ojos rojos, irritados e incluso posibles infecciones derivadas de un mal cuidado de las lentes de contacto. Además, dentro de nuestro catálogo también encontrará todas las soluciones para la hidratación de su visión y gotas para los ojos, que le ayudarán a aliviar los posibles síntomas que puedan surgir.

Cuide la limpieza de sus lentes de contacto y su estuche de lentillas

La última gran causa de sufrir ojos rojos por el uso de lentillas, podría ser que no seguimos unos buenos hábitos de uso para mantener limpios tanto las lentillas como los portalentillas. Unos hábitos que, aunque son de sentido común, vale la pena recordar. A saber:

• Lavarse bien las manos antes de manipular las lentillas
• Renovar frecuentemente el portalentillas (y asegurarse de que está siempre limpio)
• No utilizar productos que lleven más de tres meses abiertos
• Ser riguroso con la fecha de caducidad de las lentillas
• Cambiar de lentillas en casos de infecciones oculares (ya que podrían volver a contaminar el ojo)
• No compartir las lentillas absolutamente con nadie
• No llevarlas puestas todo el día, dejar descansar los ojos de vez en cuando

Otro tipo de causas para los ojos rojos

Por último, existen otras causas que, aunque menos frecuentes, también pueden afectar a la buena salud de nuestros ojos:

El maquillaje: algunos productos para maquillar los ojos (eye-liner, rímel, sombra de ojos, etc.) pueden llegar a producir irritación si se utilizan con demasiada frecuencia.
Los fármacos: el consumo de algunos fármacos podría tener reacciones adversas tales como picor, escozor, enrojecimiento de las mucosas, disminución de la secreción lagrimal, etc.
Ciertos ambientes: si trabajamos en ambientes muy cargados o con mala ventilación, estos síntomas también podrían aparecer.

Siga estos tips para evitar los ojos rojos por el uso de lentillas

Pero recuerde que para evitar, o por lo menos para reducir al máximo los ojos rojos por lentillas u otros factores, basta con seguir escrupulosamente una serie de cuidados:

• Mantener una higiene estricta, no utilizar las lentes de contacto más tiempo del debido, y desecharlas siempre que se cumpla el tiempo recomendado de uso.
• No frotarse nunca los ojos, porque si lo hacemos, podemos introducir bacterias dentro de ellos. Si notamos que tenemos los ojos secos, podemos utilizar lágrimas artificiales. Y si las lentillas nos molestan, debemos retirarlas y dejar descansar los ojos.
• Parpadear con frecuencia, especialmente si está leyendo o delante de una pantalla.
• Evitar lo máximo posible elementos que pueden irritar los ojos: agua, sol, polvo, ambientes secos, etc.
• No entrar nunca al agua con las lentillas puestas: el agua, especialmente el de piscina, estropea el material del que están hechas las lentillas y se pueden contaminar.
• No quedarse dormido con las lentillas puestas.
• Usar lentillas desechables (por ejemplo, lentillas diarias), o por lo menos, que estén fabricadas con materiales de primera calidad.