Hoy desde LentillasSi vamos a tratar un síndrome más común de lo que pensamos: el del ojo seco.
Qué es el síndrome del ojo seco
El síndrome del ojo seco es una alteración que se produce en la superficie de la córnea y la conjuntiva por falta de lágrima o porque ésta es de mala calidad. Como consecuencia, la superficie del ojo sufre falta de lubricación, lo que puede dar origen a molestias oculares, problemas visuales y lesiones en la córnea y la conjuntiva. Según la oftalmología: “El término engloba tanto situaciones de baja cantidad de lágrima, mala calidad, como exceso de evaporación de la misma.”
Si sufres el “síndrome del ojo seco” seguramente hayas visitado rápidamente la consulta de tu oftalmólogo por las molestias que este síndrome provoca como quemazón, enrojecimiento, dificultad para abrir los ojos por las mañanas, fotofobia (sensibilidad a la luz), sensación de sequedad, sensación de visión borrosa y ojo cansado, picor, ardor y malestar al fijar la vista en actividades como la lectura, conducción o el uso pantallas: ordenadores, tables, móviles, televisión etc.
Causas más comunes del síndrome del ojo seco:
– Con la edad, es decir, en personas mayores, disminuye la secreción ya que las células que generan la lágrima se atrofian.
– Los cambios hormonales como el embarazo, el consumo de anticonceptivos y la menopausia en las mujeres a partir de los 45 años.
– La lectura prolongada reduce el parpadeo, por lo que aumenta la evaporación y la lágrima tampoco se distribuye correctamente.
– El uso de lentillas.
– El mal uso de las lentillas, si se usan más tiempo del recomendado. Por eso, si tienes alguna duda, puedes ponerte en contacto con nosotros.
– El tabaquismo disiminuye la secreción de lágrimas.
– La cirugía reflectiva como Lasik.
– El consumo de ansiolíticos, antidepresivos o antihistamínicos.
– Las enfermedades cicatrizantes de la superficie ocular como la conjuntivitis vírica severa.
¿Sabes cómo evitar la sequedad ocular?
El tratamiento del ojo seco es a largo plazo ya que la evolución es lenta y progresiva, por lo que si quieres evitar la sequedad ocular te aconsejamos que te sitúes correctamente ante el ordenador y descanses la vista de vez en cuando para que el ojo se relaje.
Es importante también que trates las enfermedades oculares correctamente para que la sequedad del ojo no sea una de las secuelas tras sufrir las mismas.
La alimentación también afecta a la secreción de lágrimas por lo que seguir una dieta rica en omega 3 y baja en omega 6, te ayudará a evitar el síndrome del ojo seco. Come frutos secos o pescado azul y no te olvides de que el equilibrio nutricional es fundamental para el ojo.
Parpadear regularmente cuando fijas la vista al móvil o lees durante varias horas seguidas, aumentar el nivel de humedad en el aire de trabajo y en casa, utilizar gafas de sol cuando estés al aire libre y beber mucha agua, son consejos fáciles de cumplir y muy útiles para evitar la sequedad del ojo. Aún con estos consejo a veces seguimos teniendo el ojo seco y tenemos que recurrir de forma habitual al uso de lágrimas artificiales, de diferentes tipos según la severidad de nuestra sequedad.
Ahora que ya conoces qué es, las causas y los consejos para evitar el síndrome del ojo seco, esperamos que tomes nota y a partir de ahora ¡no te falten lágrimas!
