¿Es recomendable cocinar con lentillas?

Es frecuente que cuando una persona comienza a usar lentes de contacto se genere la pregunta de si podrá usarlas también cuando está cocinando. 

Como en todo, existen excepciones en las que no debería usar lentes de contacto sin embargo el uso de lentillas frente a gafas en la cocina es lo ideal.

Ver mientras se cocina es algo fundamental por eso las lentes de contacto resultan tan útiles. Hoy le contamos cuáles son las ventajas de que emplee lentillas frente a gafas si es un amante de la cocina para que no le quede ninguna duda de cuál es la mejor opción.

¿Lentillas o gafas en el mundo culinario?

El primer aspecto sobre el que debe reflexionar es en la calidad de vida que ofrecen unas lentes de contacto frente a unas gafas si usted es una persona activa o que tiene un trabajo en el que necesita moverse. 

El movimiento es algo intrínseco del hecho de cocinar, no se puede imaginar a un cocinero sentado o sin moverse. De hecho seguro que si piensa en grandes chefs lo primero que se le viene a la cabeza es una gran cocina y a una persona moviéndose de aquí para allá.

Así, en este tipo de contexto laboral es imprescindible una movilidad cómoda y en consecuencia las gafas son un objeto que se deposita sobre el rostro y que puede deslizarse o caerse. En definitiva, las gafas no son del todo funcionales en el mundo culinario.

Beneficios de emplear lentillas en la cocina

En la alta cocina hay muchos cocineros que tienen mala vista, sin embargo son pocos los que usan gafas durante sus horas de trabajo porque son conscientes de que suponen una barrera e impedimento para poder desarrollar bien sus dotes culinarias.

Estos son los principales beneficios de usar lentillas en la cocina:

• No se empañan

Ante los cambios de temperatura, el cristal de unas gafas se empaña. Esto puede suponer un serio problema si hablamos en términos culinarios, porque en el tiempo en el que se desempañan las gafas una comida se puede haber quemado y, en definitiva, obligan al cocinero a pararse.

Lo bueno de las lentillas es que no se empañan aunque haya cambios de temperatura.

• No se caen

Al estar en una cocina es normal sudar, y que dicho sudor haga que las gafas se deslicen por el tabique de la nariz. Esto es bastante molesto porque obliga al cocinero a tener que estar subiéndose todo el rato las gafas para ver bien. Además, al hacer esto es fácil manchas el cristal de las gafas con grasa.

De hecho, la posibilidad de que las gafas se caigan y se rompan está presente, lo cual supone una pérdida económica importante.

Lo mejor de las lentes de contacto es en concreto que permiten gran movilidad a su usuario, sin riesgo a caídas ni roturas de ningún tipo.

• Aptas para cualquier ametropía

Debe tener presente que cada persona que usa gafas puede tener diferentes problemas. Por ejemplo, aquellos que tienen presbicia como norma emplean dos tipos de gafas, unas para distancias cercanas y otras para lejanas, o unas solamente, progresivas.

En la actualidad existen lentes de contacto para presbicia. Así, son una opción muy útil para los cocineros, con una cierta edad que sufren de presbicia.

Por supuesto, otro de los beneficios de usar lentes de contacto es que estas no “transforman” su material ante el calor. Si bien es cierto que un cocinero se expone a temperaturas muy altas, las lentillas ni se derriten ni moldean a causa de esto.

Existe una leyenda urbana que hace alusión a esto en concreto, sin embargo en Lentillas Si le indicamos que la temperatura para que una lentilla se descomponga hacen falta temperaturas muy altas, más de las que soporta el propio cuerpo humano.

Por consiguiente, son muy seguras aunque sí es cierto que ante temperaturas tan altas sus ojos se pueden secar un poco. La mejor solución para esto es que use gotas o colirios que restablezcan la capa lubricante de su ojo.

Maneras de limpiar las lentes de contacto de forma correcta

Si usted trabaja en cocina o bien es un amante del mundo culinario que pasa bastante tiempo tras los fogones, hay una serie de pautas que debe conocer y seguir para evitar problemas oculares.

Una buena rutina de higiene es algo que todo aquel que use lentes de contacto debe tener interiorizado y más aún si se está expuesto a una cocina.

Como sabe, la posibilidad de que sus ojos entren salpicaduras de diferentes recetas o extractos de alimentos que puedan ser picantes es elevada, sin embargo es algo a priori que no se puede evitar porque para cocinar siempre tendrá que tener los ojos abiertos. 

De cualquier modo, aunque esto pueda pasar las lentillas siguen siendo una opción muchísimo más práctica que las gafas.

En consecuencia, lo primero que le recomendamos es que emplee guantes siempre que pueda. Si bien es cierto que usar guantes puede ser un incordio porque no permiten sentir y manejar bien los alimentos son importantes para evitar intoxicaciones.

Cuando se manipulan alimentos como cebollas o picantes con las manos existe un riesgo alto de rozarse de forma involuntaria los ojos o la zona próxima a los ojos y desarrollar una inflamación no deseada.

Así el uso de guantes desechables si tiene lentillas es algo fundamental, al menos al estar en contacto con este tipo de sustancias.

Pero debe saber que ante las cebollas, las lentes de contacto son una barrera excepcional para quienes les lloran sus ojos al trocearlas.

Por otra parte, si usted emplea lentes de contacto que no son diarias, es decir que no tira al acabar la jornada, la limpieza que va a tener que seguir debe ser un poco más estricta que la de otra persona que no se expone a una cocina tanto tiempo.

Al acabar el día, limpie en profundidad sus manos antes de quitarse sus lentes de contacto para limpiarlas. En cuanto a la higiene de estas, mi consejo es que la lleve a cabo con más determinación que lo haría de forma habitual.

Tenga presente que sobre la lente puede haber micropartículas de alimentos así como grasa que deben ser eliminadas por completo. De lo contrario existe riesgo de que al día siguiente cuando se vuelva a poner sus lentillas le generen algún tipo de reacción.

Asimismo, en el caso de que usted sea cocinero profesional desde Lentillas Si le recomendamos que valore la opción de usar lentes de contacto diarias, porque suponen una manera de asegurarse de que su higiene es 100% segura.

Otro aspecto al que debe prestar atención es en el caso de que mientras esté cocinando le salte aceite a los ojos. Deberá ir rápido a un baño para quitársela de forma inmediata. En este momento y con las manos limpias quítese las lentes de contacto y desinféctelas.

Ante un posible daño ocular, no espere en pedir cita para acudir a su oftalmólogo. La vista es una herramienta fundamental para un cocinero, lo mismo que lo son las ollas o cuchillos. Si sufre alguna molestia lo mejor es que busque una solución lo más pronto posible.

El uso de lentillas en la cocina es algo que además de ser recomendable es muy útil ¿A qué espera para comenzar a darles uso?