Preguntarse cuándo pueden utilizar los niños lentes de contacto es lo más normal del mundo si considera que lo necesita.
Las lentes de contacto no deben considerarse un medio para mejorar la visión reservada a los adultos. Cada vez se ven más niños que las usan.
Si usted tiene niños en casa seguro que se estará preguntando cuándo es el mejor momento para que puedan usarlas y asimismo si es peligroso.
Hoy en Lentillas Si le contamos todo cuanto tiene que saber sobre el uso de lentillas en niños y cómo comenzar a usarlas.
¿Cuál es la edad mínima para usar lentillas?
En España, más de un 50% de los niños necesitan algún tipo de corrección visual, sobre todo en las edades comprendidas entre los 15 y 18 años.
Aunque la adolescencia es el periodo en el que más se detectan problemas de vista como la miopía en concreto, estos se pueden solucionar antes con un control riguroso.
Las lentes de contacto sí las pueden emplear los niños, de hecho, incluso hay modelos creados para niños recién nacidos de forma personalizada.
Aún así, la edad ideal para comenzar a usarlas depende de cada niño.
Una vez que el especialista haya determinado el tipo de problema de visión de su hijo, entonces existirá la posibilidad de usar lentillas, por eso no hay una edad mínima.
¿Cómo saber si los niños están listos para usar lentes de contacto?
El hecho de que un niño comience o no a usar lentillas depende de su personalidad.
Hay adultos que no dan el paso porque saben que no son tan cuidadosos como para ello y, al contrario, hay niños muy responsables y cuidadosos que son los usuarios perfectos.
Tiene que observar su comportamiento, ver si es meticuloso y sigue de manera poco perezosa su rutina de higiene personal.
Asimismo es interesante ver que ellos tienen motivación por emplearlas, porque si ven su uso como un castigo u obligación notarás que no se sienten cómodos con ellas.
El desarrollo del ojo en los niños
Al nacer los niños tienen hipermetropía.
Sin embargo, esta se va corrigiendo con la edad, hasta que consiguen ver de manera perfecta.
Cuando esto no ocurre, puede ser que sea necesario el uso de lentillas o gafas.
Así, una de las formas clave de evitar que su hijo tenga problemas de vista es que se fije en cómo interactúa con las diferentes cosas en cuanto a la visión.
Si percibe alguna anomalía lo mejor es que acuda a un especialista cuanto antes para que valore si existe algún problema refractivo o no y, en caso positivo, poder solucionarlo cuanto antes.
El uso de las lentillas frente al de las gafas
Existen una serie de ventajas que convierten a las lentillas en una alternativa mucho mejor que las gafas incluso en los niños.
● Ideales para jugar y para hacer deporte
Los niños se pasan los días corriendo, saltando, jugando, etc.
El uso de lentillas en niños es perfecto para evitar que las gafas se caigan y, al mismo tiempo, que le resulten cómodas.
Sobre todo en los pequeños de la casa es fácil que, sin darse cuenta, reciban un golpe que haga que las gafas se caigan y se rompan.
Algo que sus padres sufren al ver la cantidad de dinero que supone tener que comprar otras.
● Función social
Aunque por desgracia no debería ser así, los niños que desde pequeños usan gafas son más vulnerables en su entorno social.
Es fácil que ante cualquier mal entendido sufran algún comentario despectivo de sus compañeros por usar gafas, algo que le provocará problemas de autoestima.
El uso de lentillas evita este problema, que es más común de lo que parece.
● Siempre se mantienen limpias
Seguro que si usted tiene gafas o ha visto a niños usarlas, se ha percatado de lo fácil que se ensucian.
Ellos las cogen por los cristales, al jugar se pueden llenar de polvo, con el uso de mascarillas se empañan…
Esto supone un problema porque el niño no va a ver bien. Sin embargo, con las lentes de contacto, nunca sucede esto y el pequeño mantiene siempre buena visión.
● Mejoran la calidad de la vista
Esto es un hecho.
Frente a las gafas el uso de las lentillas favorece que se vea de manera más nítida y no suponen un obstáculo en el campo visual.
● Son más baratas
En general, el empleo de lentes de contacto es más económico que el de las gafas, cuando tenemos variaciones de graduación constantes en espacios cortos de tiempo.
Sobre todo, en el caso de los niños se recomiendan las lentillas diarias que son más cómodas para ellos.
El uso correcto de las lentes de contacto en niños
Este es un apartado importante porque la misión, en este caso, es enseñarle a su hijo o hija la importancia de usar las lentes de contacto.
Algo primordial es inculcarles que el uso de lentillas va de la mano del de la higiene.
Así, el primer paso que tienen que seguir siempre al pie de la letra es el de limpiar sus manos antes de manipular las lentillas.
A continuación, tienen que limpiarlas con el líquido y guardarlas en su estuche hasta el día siguiente.
De cualquier modo, los especialistas suelen recomendar que en niños pequeños se usen lentillas diarias, porque son desechables y se evita la necesidad de limpieza.
Esto significa que el pequeño también tendrá menos posibilidades de tener alguna complicación ocular por no limpiar de forma correcta las lentes.
En cualquier caso, en nuestra tienda online de Lentillas Si, Le ofrecemos una gran variedad de distintas lentes de contacto diarias.
Asimismo ponemos a su disposición diferentes tipos de soluciones limpiadoras, gotas, lágrimas y estuches de viaje divertidos para completar su uso de las lentes de contacto.
La primera vez que use lentillas
Si es la primera vez que su hijo va a emplear lentillas le recomendamos que le ayude a tener paciencia.
Intente hacerlo con él y evite que haya demasiada gente cerca porque sino se va a sentir más nervioso y presionado.
Indíquele que no hace falta que tenga prisa. Preséntale el uso de las lentillas como un juego, como algo divertido que le va a hacer ver cosas maravillosas.
Lo importante es que usted, como adulto, no tenga miedo porque eso el pequeño lo notará. Tenga presente que de ningún modo van a poder hacerle daño.
Su óptico u oftalmólogo le indicará cómo hacerlo.
Sin embargo, si llegado ese momento no recuerda cómo hacerlo, puede buscar algún tutorial en Internet que le recuerde los pasos.
Asimismo, otro momento que puede ser tenso es cuando hay que retirar las lentes de contacto.
Aquí tiene que tener mucha más paciencia que antes.
No se preocupe si a la primera no es capaz, haga que el niño se calme y que lo vuelva a intentar después de forma suave.
En cualquier caso, poco a poco el pequeño tiene que ir ganando autonomía hasta que se ponga las lentes por sí mismo sin necesidad de ayuda extra.
Tenga en cuenta que los niños siempre aprenden más rápido que los adultos y, el uso de lentillas, le va a ayudar a hacerlo más responsable.
Si tiene niños en casa con la edad adecuada para que usen lentes de contacto ¿a qué espera para que mejoren su calidad de vida?