El ojo es uno de los órganos más fascinantes e importantes del ser humano. Históricamente, ha sido una pieza clave de la supervivencia de la especie. Al fin y al cabo, los expertos calculan que hasta un 80% de la información que las personas procesan, proviene del sentido de la vista. Y aunque la investigación oftalmológica haya progresado a un ritmo trepidante en las últimas décadas, todavía hay muchos detalles de su funcionamiento que se escapan del conocimiento científico.
Al mirar alrededor, una paleta variopinta de colores se extiende en la visión de la mayoría de los humanos. La cantidad de matices percibibles es, ciertamente, asombrosa. Ahora bien, ¿Se sabe cuántos colores ve el ojo humano? Ésta es, precisamente, una de las cuestiones que aún no ha generado un consenso científico. A pesar de ello, se sabe que se puede hablar, como mínimo, de un millón de variaciones cromáticas.
¿Pero a ver, qué es exactamente el color?
Los colores son el resultado de un proceso sensorial que empieza en los ojos, mediante fotorreceptores, y que se desplaza hasta el cerebro. En realidad, el color es fruto de una frecuencia de luz determinada, que hace que los humanos detecten un color u otro. Se ha establecido que el ojo humano puede notar todos aquellos tonos que forman parte de un espectro que va desde, aproximadamente, los 700 nanómetros hasta los 385 nanómetros.
Cien graduaciones de azul, verde y rojo
Ya en el siglo XVIII, el científico inglés Thomas Young, célebre por haber demostrado que la luz es de esencia ondulatoria, evidenció también que las células que captan la luz llegan a reconocer hasta un centenar de variaciones de los colores azul, verde y rojo. Mediante estas graduaciones básicas, el cerebro humano puede componer muchos más matices cromáticos.
Cada persona, y cada ojo, es un mundo
Cada persona dispone de sus propios ojos, y por lo tanto percibe el mundo exterior de una forma singular. Eso explica que a menudo distintas personas tengan la sensación de encontrarse ante colores diferentes. Y es por este motivo también que resulta tan complicado responder a la pregunta de cuántos colores ve el ojo humano. La subjetividad y las propiedades de cada órgano pesan, y mucho, en esta cuestión.
No obstante, los estudiosos calculan que, como mínimo, una persona con una buena salud visual puede ver hasta un millón de colores distintos. La cifra, a determinar con mayor certeza, se podría estirar hasta los diez millones.
¿Qué son los bastones y los conos?
Sí, no se preocupe por la pregunta, que seguimos hablando de la vista. Entremos en materia. La retina del ojo dispone de dos fotoreceptores de naturaleza distinta. Se trata de los bastones y los conos. Ambos comparten el hecho de ser los encargados de captar la luz, y por lo tanto, los responsables de la posibilidad de ver, los bastones no detectan los colores pero son muy sensibles en condiciones de poca iluminación, en cambio los conos,situados en la fóvea son los responsables de ver los colores.
Su diferencia reside en que los bastones son los que trabajan en entornos pocos luminosos, y en cambio los conos se ocupan de los momentos con más iluminación. Los científicos aseguran que, de los primeros, se suelen tener, aproximadamente, un mínimo 110 millones, mientras que de la cantidad de los segundos se ubica entre los 6 y los 8 millones.
¿Por qué se producen alteraciones como el daltonismo?
Existen personas que son incapaces de distinguir determinados colores. ¿A qué se debe, esto? Pues bien, a una alteración genética que provoca la disfunción de uno o más tipos de conos. Se le denomina daltonismo, en honor a su descubridor, John Dalton, que la detectó en pleno siglo XIX.
Hay muchas tipologías de daltonismo, des de la acromatopsia (que no permite percibir ningún color), hasta el monocratismo, el dicromatismo y el tricomatismo. El más frecuente afecta a los colores rojo y verde.
Conclusiones
El ojo humano es, todavía en la actualidad, un gran desconocido. A pesar de ello, sabemos de un modo aproximado, cuántos colores ve el ojo humano. Las personas tienen la capacidad de distinguir una enorme variedad cromática, es decir, de frecuencias de luz distintas. Esta cifra podría situarse, perfectamente, por encima del millón de colores. Teniendo en cuenta la complejidad y las posibilidades de la visión humana, se hace más imprescindible tomar conciencia y procurar mantener una buena salud visual.